La ventaja de los champiñones es que son un producto que se encuentra fácilmente en cualquier supermercado, en cualquier época, y a un precio asequible. Y que siempre quedan deliciosos. Como en esta receta que nos envía nuestra amiga Nuria.
INGREDIENTES (para cuatro personas)
  • 16 o 20 champiñones grandes (según el tamaño).
  • 100 gramos de jamón serrano en taquitos
  • 1 cebolla mediana
  • 100 ml. de tomate frito
  • Medio vaso de vino blanco
  • Orégano
  • Aceite de Oliva
  • Sal
  • 100 gramos de Queso Manchego Curado o Semicurado

PREPARACIÓN

  1. Limpiamos bien los champiñones, y separamos con cuidado el tronco del “sombrerete”, que será lo que rellenaremos posteriormente.
  2. Troceamos la cebolla en pequeños trozos, y la salteamos en una sartén. Cuando empiece a estar tierna incorporamos los taquitos de jamón serrano, y los troncos de los champiñones, que también habremos troceado. Salteamos un par de minutos.
  3. Retiramos del fuego, y reservamos en un bol, mezclándolo con el tomate frito y una cucharada de orégano.
  4. En una fuente de cristal apta para horno colocamos los sombreretes de los champiñones, que rellenaremos con la mezcla preparada, ayudándonos con una cuchara.
  5. Vertemos el vaso del vino en el fondo de la fuente.
  6. Cogemos el Queso Manchego, y bien en pequeñas lascas, o rallado, lo colocamos sobre cada uno de los champiñones, cubriéndolos generosamente.
  7. Metemos la bandeja en el horno, previamente precalentado a 180º, a una altura media, y dejamos hornear durante 20 o 25 minutos.
  8. Sacamos del horno, y con mucho cuidado los emplatamos.
  9. ¡¡Y A DISFRUTAR!!

Nuria nos dice que como más le gustan son calientes. Pero se nos ocurre que también pueden ser ideales si se dejan reposar para servirlos templados. ¡Gracias, Nuria!

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