Que los productos lácteos son beneficiosos para una buena salud ósea del organismo es sabido por todos. Pero recientes estudios han probado que el consumo de queso y otros productos lácteos podrían también ayudar a proteger los dientes de la caries, según la Asociación Americana de Odontología.
La investigación dividió a los participantes en cuatro grupos diferentes, a los que se les asignó la ingesta de queso, leche, yogur sin azúcar, y parafina como elemento de control. Después de masticar o retener el alimento en la boca durante tres minutos, se enjuagaban la boca con agua, y se les midio el pH de la placa dental en cuatro lugares diferentes de la boca, con intervalos de 10, 20 y 30 minutos.
Con ello pudo comprobarse que los niveles de pH para los que habían consumido el queso había aumentado rápidamente en cada intervalo de medición, lo que parece probar que el queso posee importantes propiedades anticaries.
Y esto se concluye porque un pH inferior a 5,5 supone un riesgo de erosión dental, nivel que era ampliamente superado por el consumo de queso.
Esta elevación del pH podrían estar motivados por el aumento de la producción de saliva en la masticación, además de otros compuestos que son propios del queso y pueden adherirse al esmalte dental creando una protección contra el ácido.
